✾
Hoy desperté gritando.
Abrí mis ojos y descubrí en lo que me he convertido.
Te veo, pienso y deseo.
A veces dulce, a veces agrio.
Gran púrpura. Pequeñas frases.
Quiero darte algo que siempre te haga recordarme.
Quiero darte algo por lo que siempre debas olvidarme.
En vez de salir tras de ti. Huyo conmigo.
Recuerdos agigantados.
Esos dedos. Tus diminutas huellas. Tu suave mano.
Podría escribirte mil cosas.
Podría darte mil cosas.
Podré sacarte una sonrisa.
Pero nunca serás mía. No hoy.
Continuo mirando el horizonte, llevo así más de media vida.
Sigo mirando a la nada, deseando verte venir.
Sigo mirando a la nada, deseando ver que regresas a mí.
Continúo abandonándome en el horizonte, susurrando al viento.
Tú, mi fuerza de espíritu. La razón de vivir.
Tú, mi tesoro más preciado.
La muestra que Dios recogió, para moldear la sonrisa.
No puedo olvidarte, y ya lo he hecho.
Algo de tristeza hay dentro de mí.
Me he despertado gritando. Te recuerdo, no sé quién eres.
Te recuerdo. No sé quién serás, y te echo de menos.
No sé quién eres, me haces falta. Dónde has dejado mi alma.
Como polen al viento, te has ido sin mí.
¿Por qué me has abandonado? ¿Qué es un latido sin ti?
¿Cómo descubrir la magia de un insípido martes? Todos los martes son iguales.
Todos los días iguales. Todo es todo y siempre, nada.
No es mi intención con estas palabras pedirte disculpas.
Sabes muy bien que fui sincera. Que el tiempo ha hecho de las suyas.
Que nuestros momentos fueron inmensamente buenos.
No es mi intención con estas palabras pedirte disculpas.
Sabes muy bien que siempre fui sincera.
Soy sincera conmigo ahora, y sé, que nunca fuiste mía.
Soy sincera contigo, nunca fui tuya.
¿Por qué reconozco que te has ido conmigo, y sin mí?
¿Por qué no soy yo?
¿Por qué si nunca fui tuya, te has llevado todo de mí?
Mi ausencia prolongada. Esos momentos en que estoy ida.
Cada instante que regalo al viento, van dedicados a ti.
No puedo detenerte, no puedo ir contigo, no eres para mí.
Siempre serás mía. Siempre estaré contigo.
Esta vida no es nuestra, empezaré a creer que existen otras.
Otras vidas, donde siempre serás mía.
Te pregunto a ti Viento, ¿le has dicho todo lo que siempre he querido susurrar a sus oídos?
Esta vida no es nuestra, confiaré en que escuchas mis versos.
Confiaré en que algún día te conoceré.
Estarás siempre aquí. Conmigo. Entre el calor de mis sentimientos y la suavidad de tus futuras palabras.
Siento tristeza. No puedo recordarte.
Siento tristeza. Puedo sentir que un día estuviste conmigo. Anhelo tus suspiros.
Siento tristeza, no te recuerdo, no sé cómo, ni quién eres.
Pero puedo sentir cómo me haces falta, sentir el vacío que has dejado.
No sé a quién intento invocar.
No sé si ya te conozco. No sé si te conoceré.
No sé si irás o vendrás.
Siento tristeza, ¿será porque te alejas?
¿Cuándo escribiré a tu alegría? ¿Cuándo seré parte de ti?
Te alejas, te vas, vete. Sin mí, vete.
Vete cargada de mí. Escuchando el viento.
Te alejas, te vas, vete.
Algún día te conoceré.
Algún día el viento te traerá hacia mí.
Escucha el aire cantando, recitando versos.
Escucha tus suspiros, soy yo.
Me despierto gritando al viento que deseo conocerte.
© Saliary Röman
_______________________________________________
¡Bienvenidos sean!
❤!
Veo en tu historia que empezaste en 2007 a escribir y lo retomaste en 2010 con fuerza y no lo dejaste ya. ¡Felicidades Salyari! ¡Me gustó tu poema por ser sincero, escribir al desamor es amarse más a uno mismo! Seguiré viniendo por aquí…
Me gustaMe gusta
Me ha gustado mucho. Muy intenso. Y hay palabras que clavan en blando: «Todo es todo y siempre, nada»
Versos de asoladora belleza. Enhorabuena.
Me gustaMe gusta
,,, lindos, muy lindos tus versos, Saliary, todos ellos; saludos, poeta; Orión
Me gustaMe gusta
Gracias por pasarte por aquí.
Por tu tiempo y comentar.
¡Un placer!
Me gustaMe gusta
Nice piece! 🙂
Me gustaMe gusta