Un lugar

UN LUGAR

Yo vengo de un lugar invisible, donde todo habitante quiere ser feliz,
y su esclavitud es buscar felicidad fuera de si, sin jamás tomarla entre sus manos.
Se confunde el miedo con respeto, y desde el miedo se educa.

Un lugar invisible, donde una persona “educada” no es definida por la “actitud” hacia el prójimo, si no, por el apile de títulos inertes.
Allí la ignorancia suma votos.

El respeto se mide en moneda, aunque el monedero provenga del más vulgar irrespeto.
Un lugar donde la justicia se barema en clases sociales.
Donde todos chillan al tiempo,
todos engullen hipocresías,
y todos aplauden al son de la conveniencia.

Existe un lugar invisible que se alimenta de mentes dormidas,
y el más profundo silencio.

Yo soy también invisible. Sigo calladita. Pero creo en «mi sitio» dentro de lo inperceptible.
Creyente de la potencia de mi diminuto espacio.
Me atrevo a creer que puedo cambiar, lo que con la mente puedo tocar.
A callar cuando no tengo razón.
A saber aceptar lo bueno, lo no tan bueno,
y agarrarme a la oportunidad que me brinda mi buena suerte.

Me atrevo a creer que la suerte está en mi mente, y a esa también puedo abrazar.
Confío en el poder de pequeños cambios,
de pequeños susurros, de caras nuevas, inéditas canciones.
Admiro la fuerza del que sabe escuchar,
del que oye el silbido de los hechos, sin juzgarlos.
Confío en la profundidad de la mirada.
En la energía de los sentimientos.


Creo en el árbol que saludo a cada mañana,
en  la sonrisa que me regala a diario el espejo.
Creo en dar los buenos días al día, las buenas noches a la noche.
Confío plenamente en la importancia de las intenciones…
A mi pequeño mundo estoy cambiando.

Käthe Kollwitz
1934 «La muerte se apropia de una madre» | «Death Seizing a Mother»
by ©Käthe Kollwitz

Yo vengo de un lugar…
Un lugar donde la verdad se refleja en los poros,
donde es posible acariciar con  palabras,
donde los gestos son cosas.

Vengo de unos ojos, que suelen mirar el horizonte.
Ojos que observan suspiros,
leen entre líneas, sonríen a mensajes breves.
Ojos pasados por lágrimas,
agridulces, que aprenden a escoger,
a oler, a valorar, a dejar ir.

Un lugar donde la pasión empieza en el cruce de miradas,
cuando tus pupilas dilatan las mías,
y la adrenalina reacciona al parpadeo.

Donde la mortalidad queda en duda para un corazón enamorado.
Donde la pasión mueve masas.

Vengo de una boca que besa.
Una boca que se entrega a sonrisas,
que se muerde de impotencia.
Que se increpa a si misma cuando atrapa sentimientos.
Una boca que se alimenta de besos.

Vengo de un corazón amigo de la razón,
razón que de mimos se alimenta.
Vengo de oídos que escuchan opiniones,
digieren sentimientos,
actúan en conclusiones.

El valor de amar a los humanos, las cosas,
los actos, las consecuencias,
tu propio estuche.

El valor de amar es lanzarse al vacío,
brazos extendidos,
corazón palpitando,
argumentos gritando,
y  una  humilde fe de caer en sus brazos.

Amar al amor, amar libremente.
2012 Reproduction drawing IV
(after the Leonardo cartoon)
by © Jenny Saville

Soy de un lugar donde se multiplica la esperanza cuando un humano ama a otro.

  © Saliary Röman

_________________________________________________
Soy un humano agradecido.
¡Gracias por tu tiempo, por venir a verme!
❤!

Anuncio publicitario

26 comentarios sobre “Un lugar

Agrega el tuyo

  1. Creo que es la primera vez que leo una crítica social proveniente de ti.
    La mente se vuelve científica: pesa, mide, calcula y construye un mundo ilusorio.
    Le brinda tanta energía y atención que parece real.
    Con el paso de los siglos nos parece cada vez más real… y enfermamos más.
    Mientras, algunas almas críticas, desconfiamos de la «realidad». Miramos y encontramos otra realidad, más profunda, más sana, más «vivible». Recorremos sus calles y nos deleitan sus vidrieras.
    Un día, sin habérnoslo propuesto, volvemos a desconfiar de esta otra «realidad» también.
    Entonces dejamos de jugar a juzgar. Hacemos silencio, observamos, sentimos, pensamos… pero las cosas cambiaron de valor… para siempre.
    Desde ese Lugar, la visión de lo terrible compartiendo su respiración con lo sublime se hace posible. Nos deja atónitos, pero comenzamos a comprender… ¿será otra ilusoria «realidad»?

    ¿Cómo hago para devolver algo de lo que das?
    Creo útil regalarte un libro. Deseo que te guste. Pero no es obligatorio, es sólo un deseo.
    Va el link, espero que no lo conozcas y que te agrade así me sentiré que puedo darte algo yo a ti, con toda gratitud.

    Haz clic para acceder a De%20Saint%20Exuperyin_Antoine-Ciudadela.pdf

    Cariños Gigantes !!!

    Me gusta

    1. ¡Hola!

      Perdón por tardar en responder a este comentario.
      Quería haber disfrutado de tu regalo primero y luego responder.
      Muchas gracias, muchas, muchas gracias. No sé si merezco tanto. Sin duda, un gran texto.

      «He visto a las bailarinas componer sus danzas. Y una vez creada y bailada la danza, nadie
      se lleva el fruto del trabajo como provisión. La danza pasa corno un incendio. Y sin
      embargo, llamo civilizado al pueblo que compone danzas, aunque no haya para ellas ni
      graneros, ni cosecha.»
      Todo un lujo a los ojos.

      ¡Un abrazo!

      Me gusta

Cuéntame, qué te trae por aquí.

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Crea un sitio web o blog en WordPress.com

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: